Las parisinas consiguen el paso a la ronda siguiente gracias a los goles de Katoto y Bruun. El Arsenal estuvo cerca con el empate de Mead, pero no pudo ser
(22-AGOSTO-2020) La Catedral habla francés. El PSG se impuso por 2 a 1 ante un combativo Arsenal que notó la pobre actuación de su delantera estrella, Miedema. Las parisinas se jugarán el pase a la final ante el eterno rival Olympique de Lyon. 90 minutos para soñar con levantar la Orejona.
Pelea de titanes en la primera parte, con las francesas adelantándose en el minuto 14 tras un golazo de Katoto de volea, enganchando el pase de córner. La delantera fue una pesadilla para la zaga gunner. Con su poderío físico y su regate, cada balón que conducía ponía en aprietos a su marca, aunque la toma de decisiones finales fallaba por momentos. El dominio del PSG era total, y la actitud de las pupilas de Echouafni al perder la posesión era digna de admirar. Presión en tres cuartos, apretando a las inglesas para forzar errores.
Sin embargo, si se había llegado hasta aquí, era para pelear hasta el último segundo. El gol encajado hizo que las gunners cambiaran el chip y se vio un cambio en quién llevaba el peso del encuentro. Ocasiones como el de Little, que se fue por el lateral de la red, o el tiro lejano de Miedema, lo demostraba. Las parisinas tuvieron tímidos acercamientos sin inquietar a Zinsberger.
El que la sigue, la consigue. Así fue para el Arsenal, que ponía las tablas ante un grande como el PSG. Con la capitana Little al mando, que vio un hueco entre la defensa parisina para dársela a Mead, que no perdonó ante Endler. Pudo haber fuera de juego de la 9.
ARS 1-2 PAR, BRUUN APARECE PARA EL TRIUNFO
El paso por vestuarios supuso una mejoría de las parisinas, que encadenaron ocasiones sin
alterar el resultado. Katoto, Diani y 7 eran las bazas ofensivas que lo intentaban de todas las maneras posibles. Por otro lado, el Arsenal acusaba la no-aparición de Miedema, que no terminaba de encontrarse a gusto sobre el terreno de juego. Poca fluidez en los pases y menos manejo del esférico que en los anteriores 45 minutos.
La realidad se impuso, y los continuos intentos se transformaron en el 1 a 2 para el PSG. Bruun, que falló en la jugada anterior una ocasión inmejorable, mandó el esférico al fondo de la malla con el pase de Katoto. Previamente, hubo un error defensivo de McCabe al no despejar el balón robado por Diani, que se lo cedió a Katoto para la asistencia final.
Bruun pone el broche a una temporada en la que no había disputado minutos alguno, pero con la reanudación del futfem, marcó goles decisivos que dieron el pase a su equipo a la final de la Copa de Francia y a las semifinales de la UWCL.
Las inglesas, que habían combatido contra el físico de las contrarias, iniciaron el plan «remontada», pero la solidez defensiva de la zaga liderada por Paredes impedía cualquier intención de gol. Desde entonces, se convirtió en un tira-afloja que terminó con el pase del PSG a la siguiente ronda para enfrentarse al Olympique de Lyon por un billete en la final europea.