En la final disputada en Málaga, Putellas, de penalti; Aitana y Jenni anotaron para dar otro título a su club. El EDF Logroño dio la cara hasta el último segundo
(13-FEB-2021) La Rosaleda se vestía de gala, sin público, para recibir la final de la Copa de la Reina. Por un lado, el Barcelona llegaba con ganas de quitarse la espina de la dolorosa derrota ante el Atlético de Madrid en la Supercopa. Por otro lado, el EDF Logroño venía sin presión y con ganas de poner en un aprieto al rival.
Las culés no dieron opción a la sorpresa y levantaron la Copa al cielo, logrando el triplete de la temporada 19/20 (Liga, Copa y Supercopa) y siendo el equipo con más títulos coperos en su palmarés (7). Historia viva del futfem.
Una final con un claro dominio culé. Todas las jugadoras estaban en campo contrario, volcadas en ataque. La formación 4-4-2 del EDF Logroño recordaba a la utilizada en el partido de liga contra el mismo rival, con las futbolistas muy aplicadas defensivamente, y cortando todos los pases hacia el área. El Barcelona no lo estaba pasando mal, pero se notaba su incomodidad frente al sistema empleado por Moyano. Las defensas atrás, encerradas, sin dejar hueco alguno para un pase hacia dentro… son factores con los que el conjunto azulgrana no sabe desplegar su juego.
En el inicio del encuentro, las jugadoras intentaban tirar diagonales interiores pero la zaga logroñesa estaba muy atenta para tirarse al suelo y cortar acciones de peligro. Ante esta tesitura, con el paso de los minutos, cambiaron de plan y optaron por generar superioridad en las bandas con Martens y Hansen. Poco resultado estaba dando y finalmente, se vio una sucesión de centros al área, unos tras otros.
El Barcelona ya venía avisando en todos los partidos de su amenazaba a balón parado. En el minuto 17, hubo una doble intervención de Tajonar. Primero al remate de Andre y después al disparo a bocajarro de Mapi, salvando el 1-0 en La Rosaleda.
Tuvo que llegar el tanto en forma de penalti, un tanto dudoso. En el minuto 40, Putellas intentaba marcharse de dos en el área, y cayó al césped. La pena máxima fue resuelta por la protagonista. La capitana puso a su equipo por delante en la final, y, cuatro minutos más tarde, Aitana aumentaba la renta culé con una gran acción individual que comenzaba con un robo en el medio campo y acababa con un tiro a la escuadra.
Pam Tajonar estaba siendo el baluarte y cerrojo de su equipo, ya con menos revoluciones y menos fuerzas en defensa. Abrir la lata supuso que el Barcelona se soltara de sus «cadenas» y exprimiera al máximo sus cualidades y el EDF Logroño sufría y no podía parar las ofensivas azulgranas. La máxima goleadora, Jenni Hermoso, dejó su marca con un remate de cabeza al centro de Leila en el 61′. Oshoala, que saltó al campo por Jenni, estaba siendo un quebradero de cabeza para las centrales, pero su puntería evitaba una mayor goleada.
Minuto 93 y gloria final. El Barcelona volvía a hacer historia y se arman de moral para afrontar los duelos europeos en camino. El EDF Logroño probó la amarga derrota, pero llegar a la final ya es un premio para ellas.