Los goles de Esther, Rocío y Nahikari (x2) desatascaron el partido. El Villarreal encerró al conjunto blanco e hizo un gran esfuerzo defensivo, sin premio
VILLARREAL 0-4 REAL MADRID
El Real Madrid afrontaba este compromiso antes del ‘Clásico’ contra el Barcelona. Un encuentro en el que parece que llega un conjunto culé humano y un equipo merengue con fuerzas de competir. Pero la imagen que dejó las de Toril no fue la mejor. El doble pivote le costó la primera parte, con Freja Siri y Zornoza. Este era un partido para llevar la batuta, no para cederla. El técnico blanco leyó mal el guion y supo rectificar al descanso, cambiando el esquema y haciendo tres cambios de golpe.
El Villarreal salió sin miedo, con intensidad y pasando la mayor parte del tiempo en el campo rival. Una presión alta, asfixiante que anuló el juego del Real Madrid. Mejor cumplido que ese, imposible. Ainoa fue la ‘capitana’ del Submarino amarillo, vigilando de cerca a Zornoza, que era la mejor opción para iniciar la posesión. Un marcaje de cerca que presionó un botón e hizo desaparecer el mediocampo visitante. Una futbolista menos para el Real Madrid. Si a ello le sumamos el perfil de Freja Siri, que no era el más adecuado en este contexto, donde había que construir el juego, el cuadro madrileño perdía efectivos.
Weir tampoco aparecía. No era culpa suya, porque el talento que tiene la escocesa brota cuando tiene el balón en sus botas y no era el caso hoy. Las pupilas de Monforte supieron leer entre líneas y pisaban el área de Misa, que tuvo que intervenir varias veces para poner el cerrojo. La guardameta estaba muy enfadada con lo que veía y gesticulaba a sus compañeras para que despertasen, sin efecto alguno. El Real Madrid insistía con los pases por dentro, similar al partido ante el Sevilla, pero era la tecla equivocada. Entonces recurrieron a balones largos para que sus extremos Athenea y Feller pelearan con la zaga. Tecla incorrecta una vez más.
El paso por vestuarios mejoró por momentos al equipo blanco. Toril dejó en la caseta a Feller, Kenti y Kathellen para sacar a Maite, Tere y Rocío. Dejaban atrás el estéril 4-2-3-1 y optaban por el 3-5-2. El Villarreal no cesaba en su presión y estuvo a punto de anotar con una falta directa de Llompart pero Misa voló para mandarla a córner. El cansancio pasaba factura y las futbolistas locales no llegaban tanto a la portería rival pero continuaban con el 0-0. Hasta que un rebote desafortunado lo cambió todo. En el 68′, Nerea quiso mandar el balón lejos pero el despeje rebotó en una compañera suya. Weir templó el esférico y dio un pase hecho a medida para que Esther adelantara al Real Madrid.
Ese gol fue el principio del final para las esperanzas del equipo groguet. Rocío Gálvez remató un saque de esquina para abrir brecha en el marcador. Y se sucedían las ocasiones sin brillo. El Real Madrid no jugaba de maravilla. Sin embargo, las futbolistas que tiene no perdonan. Que se lo digan a Nahikari. Otra jugada de estrategia que acabó con un precioso remate de cabeza de la delantera. 0-3 y quedaba un gol de bella factura de Nahikari para conseguir su doblete particular. 4 tantos y se cerraba el encuentro en el que el Real Madrid no convenció y suma tres puntos más para seguir segundas e imbatidas en Liga.